sábado, 5 de diciembre de 2009

Escribiendo con sueño (pero escribiendo la verdad)

Tengo depresión desde hace ya más de 2 años, desde que teminé con mi en ese entonces pololo. Él fue (y es) el amor de mi vida. Dejarlo ha sido lo más difícil que he hecho en la vida, no pude parar de llorar en 3 meses. El dolor era tan grande, que podía sentirlo físicamente. Sentía como si alguien me hubiese partido en 2. Y sin embargo, no ha sido el peor dolor de mi vida. Lamentablemente, yo tenía otros duelos guardados, que no pude vivir en su momento por diversas razones, y todos ellos aparecieron cuando L y yo terminamos. Por supuesto en ése momento no lo sabía, sólo sentía dolor.

Fue el viernes 25 de septiembre. Era el día anterior al matrimonio de una amiga muy querida, me encontré con un amigos en la U cuando salí a comprar algo para comer, y decidimos ir a tomarnos un café. Conversamos de varias cosas, y en algún momento yo comenté que, para mí, L era el hombre más sexy del mundo, el único que me había hecho babear. Lo que sigue lo copié del mail que le envié a mi sicólogo ese mismo día, cuando llegué a mi casa después de que una amiga intentase rearmar los pedazos de mí:

M: blablabla...no estás enojada con L?
Ji: no, por qué tendría que estarlo?
M: blabla (eso es nebuloso para mí) o sea, yo los veía a ustedes, y veo a L con la F, porque supongo que tú sabes que a L le gusta la F?
Ji: lo sospechaba...
M: ¡es cosa de verlo! O sea, está enamorado hasta las patas! Sale fin de semana por medio con ella (blabla del estilo salen de Santiago o algo así), están siempre juntos!! Na' que ver a cuando estaba contigo, ahora sí se ve enamorado.

¿Alguna vez han sido capaces de sentir como las palabras de alguien se entierran en su cuerpo? Yo sentí mil agujas clavándose en toda mi piel, y algo así como un cuchillo en mi estómago. Los oídos me palpitaban, el aire no pasaba por mi garganta, mi cara estaba mojada con todas las lágrimas que salieron. De haber tenido 40 en vez de 27 podría jurar que habría muerto de un infarto. Al menos sentí como mi corazón se contraía como si quisiera desaparecer. M se asustó, y no me dejó manejar mi propio auto. Me llevó a casa de una amiga. Me dijo que no se arrepentía de lo que me había dicho, que era necesario que yo dejara de idealizar mi tiempo con L. Yo no era capaz de responderle, hablar requería demasiada energía...

¿Por qué esta noticia me destruyó, siendo que era razonable que L siguiera con su vida? La razón llegó el martes primero de diciembre, en la forma de un recuerdo muy antiguo. Verán, a veces, cuando pasa algo demasiado horrible, el cerebro se protege así mismo y "esconde" esa información, para que el consciente siga funcionando. Probablemente, ese recuerdo, y el dolor asociado hubiesen surgido naturalmente después de lograr mi ingreso a la universidad. Pero cuando entré ocurrió algo maravilloso: conocí al hombre más increíble de la Tierra, y evidentemente, me enamoré como una loca de él. Él era (y sigue siendo) inteligente, atractivo, varonil, dulce y divertido. A su lado yo sentía que no tenía nada que temer, que mientras él estuviera a mi lado todo iba a estar bien, porque él iba a protegerme. Y así fue por mucho tiempo...hasta que terminamos. Ahí perdí su protección. Y el dolor antiguo, del que llevaba 10 años huyendo empezó a filtrarse, en medio de las lágrimas que lloraba por mi amor perdido. Y cuando M insinuó que L jamás me había amado, o al menos no como amaba a F, destruyó la última protección que le quedaba a mi cabeza. El dolor, el desamparo, la soledad que había sentido antes volvió como un río desbordándose. Y así fue que, ese fin de semana, me acerqué ( y casi caigo) al abismo de la locura y la muerte.

4 comentarios:

  1. Ji
    Llgué a tu blog por zancada. Deseo de todo corazón que pronto te sientas mejor y que logres sanar tus heridas. Es un proceso difícil pero se puede.

    Te envío toda mi energía!

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  2. Ay Ji! tengo mucho que decir:
    Primero, veo que eres harto mayor que yo (10 años), aún así siento que te entiendo.

    Mi historia es distinta, pero las emociones que experimenté se asemejan un poco a lo que tú has sentido. Siendo muy joven, muy niña, hace unos 2 años me comencé a enamorar -muy encontra de mi razón-, de un tipo 4 años mayor que me ilusionó mucho, para después dejarme pagando.

    Yo nunca quise desarrollar mayor afecto por él, pero no pude resistir. El llenaba todo mi espacio, mi ilusión, mi motivación.
    Fue fuerte porque años antes yo sufría de crisis existenciales (parte de la maduración, supongo) y en él encontré mi razón, mi inspiración, incluso mi vocación. Desde que apareció en mi vida desplegaba a rienda suelta toda mi creatividad. Los dones que tenía aparentemente ocultos florecieron con un tremendo fervor.

    Bueno, me va a salir largo contarte todo en el post, así que te dejaré una entrada en mi blog.

    Respecto a lo que tú escribiste, yo también he sentido como las palabras de algun cercano se me clavaron en el cuerpo, de tanto dolor.

    Te invito a leerme en mi próxima entrada. Allí te explicaré porqué y cómo sucedió. Ojala te sirva para saber que no has sido la única en vivir eso; no estás sola.

    Saludos! y mucha buena vibra.

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  3. ¡Ahora si puedo postearte Ji!
    No sé porqué tu blog me ha gustado tanto.
    Tengo una relación sana y que me tiene contenta, con dramillas como toda reunión de seres humanos, pero muy plena en general, amo a mi novio y todo marcha bien.
    Entonces, me detengo y me cuestiono qué onda tu blog, porqué tus palabras me calan así.
    Creo que tocaste un tema que he rehuido durante años, me he ocultado de ese dolor de pubertad que ahora con tus palabras a salido a la luz otra vez.
    Es hora de cerrar ciertas heridas, dolorosas, pero necesarias.
    Gracias por tus palabras Ji, por tu sinceridad, por mostrarte vulnerable, por compartir tu sufrimiento.
    Aunque no esté deprimida ni con el corazón roto, solidarizo contigo.
    Seguiré revisando tu blog, y espero que a medida que te lea, tus palabras vayan siendo más esperanzadoras, que te nazca sentirte bien, no que "debas" estar bien porque es lo que los demás esperan de ti, para que llegue el día en que comiences a estar bien de forma natural.
    ¡Ánimo!
    Jelena.

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  4. Sabes?
    En estos ultimos meses mi vida ha sido un completo desastre. Hoy, justo hoy, he tenido uno de los peores días del año, de aquellos días en que pese a que todo esta mal,sales relativamente confiada de tu casa, porque nada puede salir peor. Pero sale.
    Llevaba años sin plasmar explicitamente el dolor que siento y lo he hecho hoy. Mis últimas palabras escritas fueron : " Estoy parada al borde de un acantilado y sin nadie a mi alrededor"
    Me levante de la cama y fui hacia el computador encendido, de todos los comentarios de la página sólo leí el tuyo por azar y llegué a tu blog.
    Quiero darte las gracias porque pese a que no te conozca, si conozco lo que has sentido y me sentí menos sola, menos incomprendida, menos oculta de lo que me sucede frente a los demás.
    Es para mi, incluso desde el anonimato , difícil mostrarme de esta manera.

    Espero que te liberes pronto de este peso y que te sientas mejor.

    N

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