domingo, 20 de diciembre de 2009

A veces duele incluso lo que no viviste

Mi sicólogo dice que uno de mis problemas es que desciendo de un matriarcado permanente, y cargo con las vidas de mis ancestros mujeres. A ver si me explico. Mi bisabuela (mamá de mi abuelo materno) y mi bisabuelo tenían un matrimonio feliz. Dice la historia que se adoraban. Pero cuando mi bisabuelo tuvo un revés económico se suicidó. Dejó a mi bisabuela y a su hijo a enfrentar la vida solos. Mi mamá dice que su abuelita lloraba siempre que se acordaba de "su viejo". Es la primera mujer fuerte mi familia. Y mi bisabuelo el primero en abandonar.

Mi abuelita quedó huérfana de madre los 8 años. Poco tiempo después ella y su hermana fueron enviadas a un internado de monjas, y su hermano a una escuela premilitar (todo esto por el 1920). Su padre después se casó y tuvo más hijos, aunque murió electrocutado cuando mi abuelita tenía 13 años. Mi abuelita salió del internado para hacer un curso de taquigrafía a los 21 años. Conoció a mi abuelo y se casaron. Mi abuelita tenía 22 años.

Mi abuelo era artista, pintor para ser exactos. Cuando llevaban 10 años de matrimonio engañó a mi abuelita con otra mujer (ni idea si lo hizo antes, pero mi abuelita lo pilló en ese entonces). Se separaron. Mi abuelita tuvo que salir a trabajar y como no podía cuidar a mi mamá y a mi tío J, tuvo que dejarlos con su suegra para que los cuidara. Mi abuelita le pasaba dinero a su suegra (ellas se querían mucho) a mi tío, y a mi mamá. Mi abuelita trabajó hasta los 70 años. Fue la segunda mujer fuerte de mi familia, mi abuelo el segundo en abandonar (mi abuelita no sería la última mujer a la que engañaría).

Mi tío J entró a la universidad de Chile a estudiar ingeniería. Él quería estudiar pedagogía en matemáticas pero mi abuelo no lo dejó. Mi mamá quiso entrar a la universidad también, pero mi abuelo la boicoteó ¿Para qué iba a necesitar una mujer ir a la universidad? Mi mamá no quiso quedarse en la casa a espantar las moscas, y salió a trabajar, para independizarse.

La historia de mi mamá y mi papá es un poco más compleja, dado que tengo más detalles y yo soy parte de esa historia. Y me falta hablar de otros "modelos masculinos significativos". Pero creo que con lo contado antes se hacen una idea.

Crecí sabiendo que la vida para las mujeres era dura, que si querías triunfar en un mundo de hombres tenías que trabajar el doble, o el triple. Que te iban a pagar menos. Que no debía confiar en nadie, excepto en la familia. Y que todos los hombres eran potencialmente unos desgraciados, así que debía andar atenta por la vida, siempre. La verdad, estar consciente de todo eso, desde los 7 años, puede ser un poco pesado...

2 comentarios:

  1. "Que no debía confiar en nadie, excepto en la familia".
    Por lo que dices en este texto, creo que las mujeres de tu familia ni siquiera pudieron confiar en sus propios maridos, parte importantísima de la familia, quienes las abandonaron.
    No es por darle aires aun más pesimistas a tu blog, pero me parece curioso ese nivel de desamparo, ese karma constante.
    Confío en que te resistirás a cargar ese abandono y saldrás adelante.
    Espero que creas en el amor del bueno, a pesar de lo terrible que estás viviendo.
    Jelena.

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  2. No he averiguado tan atrás en mi familia, pero hay una cierta similitud con eso de las mujeres fuertes y los hombres que abandonaron.

    Se me ha educado también con el patrón de confiar en la familia, sólo que diversos sucesos con mi madre me han hecho pensar que siempre debo escuchar primero a mi corazón. Al menos el nunca se ha equivocado.

    A mi padre, pese a todos los errores que cometió, comete, y pueda cometer, lo amo incondicionalmente. Eso solamente me ha sucedido con el y con Juan, el hombre que me tocó tan duramente olvidar.

    Hablo un poco desde mi escasa experiencia, simplemente por compartir.
    Un abrazo.

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